Entender la relación entre oferta y demanda de un producto o servicio es esencial para que un negocio sea redituable y el desarrollo inmobiliario no es la excepción.
La demanda de vivienda en México siempre ha existido y existirá ya que es una necesidad básica, pero está ha ido cambiando con el paso de los años por diversos factores. Uno de ellos es la situación económica del país, ya que de esta depende el poder adquisitivo de nuestra moneda. En otras palabras, el dinero ya no alcanza para lo mismo que antes. Otro factor es el geográfico porque cada vez hay menos tierra disponible, pero hay mayor demanda así que también surge una apreciación natural de la tierra y por ende se elevan los costos de las viviendas.
A pesar de la situación económica y de la apreciación de la tierra, en el mercado existe una minoría que puede adquirir una vivienda de mayor precio. Inclusive hay personas que tienen el poder adquisitivo para comprar más de una casa.
Los desarrolladores inmobiliarios se han dado a la tarea de buscar en el mercado el tipo de propiedad de la cuál existe una demanda y de la cual hay poca oferta con el fin de minimizar la tasa de absorción de su producto.
Existe entonces una dualidad en el mercado, por una parte, hay viviendas económicas que, en su mayoría, para lograr un coste tan bajo tienen que sacrificar calidad y son necesarias porque es lo que demanda el mercado o lo que el mercado puede costear. Por otra parte, hay un mercado que puede pagar más por una propiedad y por lo tanto exige más calidad en su construcción y acabados.
En ocasiones el producto que cuesta más y que regularmente es de mayor calidad, es subvaluado porque la gente lo compara con otras viviendas más económicas. Es decir, a veces el valor de la propiedad no se ve a simple vista y la calidad de construcción está detrás de la pintura y de los muros, es por ello por lo que es muy importante acercase a un profesional inmobiliario a la hora de querer adquirir una vivienda.
https://landandbuilding.com/blog/2021/09/16/calidad-vs-mercado/