En 1976 nuestro país decretó la Ley General de Asentamientos Humanos iniciando la institucionalización de la política urbana en México, influenciada por la Primera Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Vivienda y el Desarrollo Urbano Sostenible, llevada a cabo en Canadá ese mismo año.
Desde entonces, ha sido muy difícil implementar una política urbana por diversas condicionantes, a saber: ciclos cortos de gobierno, capacidades limitadas respecto a sus facultades para regular usos de suelo, así como perfiles poco idóneos de algunas autoridades encargadas del desarrollo urbano.
Frente a este escenario, hace poco más de 25 años se crea el primer Instituto Municipal de Planeación (IMPLAN) en México, inspirado en el modelo del Instituto de Investigación y Planeamiento Urbano de Curitiba, Brasil (IPPUC), que en aquellos años era ya un referente de la planeación urbana en América Latina.
Hoy día, con cerca de media centena de IMPLANES a lo largo del país, buena parte de ellos comparten tres características: se constituyen como organismos públicos descentralizados; se rigen por una Junta de Gobierno y con el apoyo de un Consejo Consultivo; tienen un enfoque de largo plazo y desarrollo integral.
El pasado 1 junio, la SEDATU publicó el Decreto por el que se reforman diversas disposiciones de la Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, donde por primera vez se insta a impulsar la creación y operación de Institutos Municipales de Planeación, consolidando su función pública para el desarrollo urbano y en consecuencia de certeza a la inversión y a un desarrollo inmobiliario sustentable.
En el caso de Los Cabos, la historia del IMPLAN es mucho más reciente, comenzando apenas en 2010, como respuesta a una de las dinámicas urbanas más explosivas de las últimas décadas.
https://landandbuilding.com/blog/2021/09/22/que-es-el-implan/